La radiofrecuencia es uno de los tratamientos estéticos más populares de la década. Su auge es inminente. Los beneficios lo respaldan: elimina las arrugas, agrega firmeza, promueve la renovación de las fibras de colágenos y recupera luminosidad.
En el pasado, era usado únicamente en centros de estética y belleza. Las herramientas estaban al alcance de quienes tenían un alto poder adquisitivo. No obstante, en los últimos años, la proliferación de esta tecnología irrumpió en los hogares y ahora puedes aplicarte radiofrecuencia en casa.
En la siguiente publicación vas a aprender a aplicarse radiofrecuencia para que luzcas un rostro rejuvenecido y lleno de vida.
¿Qué es la radiofrecuencia?
Cuando la radiofrecuencia explotó como tecnología de estética, pocos sabían qué era realmente. Un método alejado de la jerga cotidiana.
En pocas palabras, es un tratamiento de rejuvenecimiento no invasivo donde se aplica ondas electromagnéticas de alta intensidad a la capa inferior de la piel.
Esta energía en forma de calor intradérmico promueve cambios fisiológicos en el rostro y el cuerpo.
El más importante: el aumento de la producción de colágeno; una proteína encargada de mantener unidos los tejidos conjuntivos. Cuando existe buena producción de colágeno, el rostro luce flexible, elástico, resistente e hidratado.
Hay otros efectos importantes como: mayor estimulación de la circulación sanguínea, estiramiento facial, aumento del tono de la piel, recuperación del brillo y resistencia en los ligamentos y las arterias.
¿Cómo aplicarse radiofrecuencia?
La radiofrecuencia es popular no solo por sus beneficios, también por su sencillez y rapidez. Una gran alternativa a cirugías costosas y dolorosas.
Conozcamos cómo hacerlo, cuánto dura y cuáles son las contraindicaciones.
Paso a paso para aplicarse radiofrecuencia
- Lo primero que vas a hacer es limpiarte el rostro, retirarte el maquillaje y secarte con una toalla.
- El tratamiento no es 100% efectivo, tenemos que ayudarlo usando cremas de colágeno. La crema incentivará aún más el aumento de la proteína. Coge un poco de crema y úntalo alrededor de la zona donde pasarás el cabezal del equipo de radiofrecuencia.
- Elige el modo a trabajar y la temperatura. Ojo: mayor temperatura no implica mayores beneficios. De hecho, el exceso de calor promueve un incremento de colágeno perjudicial para nuestra piel.
- Mueve el dispositivo de abajo hacia arriba, suave y uniforme. Masajea la zona con el cabezal para que las ondas electromagnéticas atraviesen las diversas capas hasta llegar a la dermis.
- Cuando acabes, realízate un masaje en el rostro para activar los principios activos de la crema y el equipo de radiofrecuencia.
¿Cuánto dura y cuántas sesiones de radiofrecuencia?
La duración y la cantidad de sesiones dependen del tipo de piel y los beneficios deseados. Los estudios sugieren que 20-30 minutos aplicando electromagnetismo en 3 sesiones cada quince días es suficiente para promover colágeno y conseguir elasticidad, resistencia y firmeza.
Si tienes dudas, confírmalo con tu dermatólogo o con un profesional de estética-belleza.
Contraindicaciones de radiofrecuencia
No se recomienda aplicar tratamientos de radiofrecuencia en mujeres embarazadas o lactando, quienes tengan cáncer o estén recibiendo sesión de quimioterapia, quienes tengan implantes de colágenos administrados recientemente, problemas de colágeno, coágulos o enfermedades del tejido conectivo.